Ayer doce de febrero, en el Teatro del Centro Cultural Villa de Móstoles (Madrid), tuvo lugar un festival de musica y danza, en celebración del día de Andalucía.
La Casa de Andalucía en Móstoles, organizadora del acto, dio a éste el nombre de Palabras por la Paz, sumándose así a esta iniciativa. Delante del escenario se colocó una sábana en la que gente anónima había dejado frases en favor de la paz (gesto que comienza a convertirse en símbolo de la iniciativa). Al principio del acto, un niño, miembro de Los Jaralillos, el coro juvenil de la Casa, leyó el poema Pido la Paz y la Palabra, de Blas de Otero, así como el texto de convocatoria de Palabras por la Paz.
Fue un acto alegre y emotivo: Los asistentes que llenaron el teatro pudieron disfrutar de casi tres horas de música (sevillanas, rumbas, fandangos...) y bailes de todos los palos, algunos ejecutados por niños de muy corta edad.
El hecho de que los intervinientes fuesen no profesionales, que por puro amor al arte hayan sacrificado largas horas de ensayo y esfuerzo para ofrecer un espectáculo agradable, es quizás el mejor homenaje que la paz puede recibir.
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